Seremos las niñeras de nuestros hombres?

¿Seremos las niñeras de nuestros hombres?
Es una duda que muchas nos podremos realizar cuando entramos en un aburrido matrimonio, porque de eso muchas probamos aunque no nos hayamos casado, visto que hay relaciones que terminan por tener esa característica.
Empezamos tiernamente con los cuidados intensivos que el hombre en cuestión necesita o aparenta precisar, le alcanzamos la ropa que se olvidó de sacar del placard, le suministramos aspirinas y remedios acordes a su padecimiento. Le hacemos el desayuno, le recordamos todas sus citas, vamos por detrás levantando ropas tiradas y tratamos de acomodar nuestros horarios y gustos a su antojo.
A cambio creemos que recibiremos protección como la daba papá a mamá y tal vez eso lo hacen repitiendo el modelo que él también vio en su casa. Rodeados ambos por los condicionamientos de las generaciones pasadas, un poco remozadas tal vez... pero no hacemos nuestro propio modelo de relación.
No quise extenderme en ejemplos ya que no siempre coinciden los modos.
Pero si estás metida en una relación de pareja y ves que esto te puede suceder o te está sucediendo; ¡HUYE YA!, sin decirlo de forma verbal porque puede que el hombre no entienda de que estás hablando y se cree una confusa discusión.
Amarlo y amarte es proteger la interrelación con el ánimo de innovar formas de brindarse y de recibir, no permitas que la RUTINA los invada JAMÁS, no uses los pensamientos vetustos y vanos de otros, reclama a tu IMAGINACIÓN el aporte de inusuales expresiones de cariño.
Ya que el AMOR no tiene dueño sino un SUEÑO que está siempre por realizarse y es un cuadro dónde le pones los colores y los trazos que quieres imprimir, puedes corregirlo y puedes destruirlo sin darte cuenta o quizás seas demasiado insconciente de lo que está en juego...
Mi preocupación por vivir un verdadero Amor nunca termina en la experiencia presente porque tal vez esté limitando el potencial que realmente tengo o idealizo en demasía a quien tengo al lado y no veo sus mezquindades (que todos tenemos)
Nada es definitivo si soy capaz de arremeter con fuerza y ganas un futuro que me subyuga lograr y soy partícipe fundamental de mis sentimientos traducidos en una relación de a dos.
Madre hay una sola dice el refrán popular, yo de pequeña decía y como la mía no hay otra por suerte; y a las Suegras su cometido bien les puede merecer un Oscar o el mérito de no haber sido perfecta... No depende del todo de ella lo que redundará nuestro hombre pero no las afrentemos, ellas ya son Historia y nosotros tenemos que diseñar un futuro mejor más si traemos Hijos al mundo...
Varones o Mujeres, un día nos harán Suegras y la pregunta es: ¿Qué tipo de suegra seremos?, ¿Harán nuestras hijas e hijos según lo que ya se hizo? si ya se hizo y no dio buenos resultados por lo visto los divorcios son moneda corriente. Más la alta tasa de personas que temen visitar un Registro Civil con intención de casarse, veamos si los papeles que firmamos, si el contrato no está perimido, si no es mejor amarse con inteligencia y hacer lo impensable por inventarse una relación maravillosa que nadie intentó o intentó a medias en la mayor cantidad de las veces...

Bien por hoy cambié un poco la temática, hice algo de momento, sin alusiones de mi obra anterior y pensando un poco en un tema que solamente tocan algunos especialistas, tuve un día menos duro que los pasados.
No pensé tanto en el pasado ni en mis sentimientos que rondan como fantasmas y me provocan a hacer cosas que no sé si son lógicas.
Traté de ser un poco más light porque mi dosis concentrada puede ser letal y no quiero matar a nadie que no sea de Amor.
Amarse sin medidas y darse en cantidades inagotables es lo mejor que podemos hacer para que luego no hayan arrepentimientos ni llantos innecesarios...
Un Abrazo a mi Alma que está un poco Solitaria por estos días...