Qué rara tu presencia en mi vida

Desde la primera intervención en mi vida, viniste con tu frescura, tu mirada tierna de libertad, tu encanto particular que me hace sentir una extraña familiaridad que disfruto tanto...
Cuándo me dedicaste esa canción romántica y me hice la primera pregunta sin respuesta, por qué a mí, qué nos está pasando, ahora representas una linda experiencia presente, estar simplemente de agrado con un ser sin edad, sin barreras, sin preguntas te conservo en mí, siento ganas de decirte gracias por aparecer, por estar...
Seguramente, no seremos nada pero te siento cerca, tan cerca, tan suave como la brisa, tan potente como los latidos de mi corazón cuando rozas mi piel, cuando me abrazas y respiras próximo a mí.
Extrañarte, es algo inevitable, agradable a la vez, pero inexplicable...
Gracias por darme las endorfinas que necesito y la sensación maravillosa de estar viva